Catorce de los 19 entrevistados a candidatos a jurado creen en el castigo máximo
Por Limarys Suárez Torres / lsuarez1@elnuevodia.com
En el primer día de entrevistas a los precandidatos a jurado para el juicio de pena de muerte contra Alexis Candelario Santana, la gran mayoría de los entrevistados ayer dijo que creía en la pena de muerte.
En total, 14 de los 19 entrevistados reconocieron que creían en la pena capital, aunque los 14 hicieron la salvedad de que ese castigo depende de las circunstancias de crimen. Solo cuatro de los 19 entrevistados dijeron que no creían en la pena de muerte.
Al final de la jornada, el juez federal José A. Fusté preclasificó a siete candidatos a jurado, cinco de ellos hombres y dos mujeres, y descartó a otros 12 tras escuchar las respuestas que brindaron durante el interrogatorio realizado por la Fiscalía federal y los abogados de defensa.
Solo uno de los siete preclasificados –una mujer– dijo que estaba en contra de la pena capital.
De esta manera, el inicio del proceso contra Candelario Santana, imputado de cometer 19 asesinatos incluyendo las víctimas de la Masacre de La Tómbola, contrastó marcadamente con la etapa similar previa al juicio de pena de muerte llevado a cabo el año pasado contra el comerciante yaucano Edison Burgos Montes, quien fuera hallado culpable de asesinar a una informante del DEA. En aquella ocasión, desde el primer día de entrevistas la mayoría de los candidatos entrevistados se manifestó en contra de la pena de muerte.
En el eventual juicio contra Burgos, el jurado seleccionado finalmente se trancó con votación 11 a 1 a favor de la pena de muerte y ante la falta de unanimidad el exempresario yaucano consiguió pasar el resto de sus días en prisión sin la posibilidad de salir libre.
El último ejecutado en Puerto Rico data de 1927, al abolirse la pena máxima en 1929 y luego prohibirse esta en la Constitución del ELA.
Pero la pena capital sobrevive en el foro federal, aunque nunca ha sido impuesta en Puerto Rico.
En definitiva, Candelario Santana enfrenta el quinto juicio de pena de muerte que se ventila en el Tribunal Federal.
Hoy, a partir de las 8:30 a.m., continuará la búsqueda de los precandidatos a jurado, donde deberán precualificar al final un total de 72 personas. Luego la Fiscalía federal y la defensa realizarán su descalificación hasta llegar a los 12 jurados y cuatro adicionales que servirán de suplentes.
Ayer, la especialista en casos de pena de muerte y fiscal federal Jacabed Rodríguez Coss, quien también participó de la selección de jurado contra Burgos Montes, encabezó el interrogatorio a los precandidatos y centró su interés en conocer si los entrevistados pueden ser capaces y tienen la voluntad de condenar a una persona a la pena capital.
Rodríguez Coss contó con la ayuda de los fiscales federales que están a cargo del caso, Bruce Hegyi, Julia Díaz Rex y Marcela Mateo.
Mientras, la defensa de Candelario Santana, dirigida por el especialista en casos de pena de muerte David A. Ruhnke y apoyada por Francisco Rebollo Casalduc, dirigió ayer sus esfuerzos a conocer si los precandidatos a jurado pueden evaluar los mitigantes y escoger una condena de vida en prisión sin posibilidad de quedar en libertad en vez de la pena de muerte.
La primera persona en ser precalificada, una mujer de mediana edad, expresó ante preguntas de la fiscal Rodríguez Coss estar en contra de la pena de muerte y que Dios es el único que le puede arrebatar la vida a un ser humano.
Entretanto, el segundo precandidato entrevistado, un hombre joven adulto, subrayó que puede vivir con la decisión de condenar a una persona a la pena de muerte si la evidencia al final del caso demuestra que ese es el castigo que se merece.
Otro hombre, de edad avanzada, indicó que, aunque cree en la pena de muerte, eso no es sinónimo de que la imponga en contra de una persona.
“Soy cristiano pero consideraría la pena de muerte”, dijo por su parte un joven adulto durante el interrogatorio.
Luego del receso de almuerzo, en la jornada de la tarde, las partes entrevistaron a nueve precandidatos a jurado y la primera en ser llamada a sala fue una mujer, de mediana edad, que destacó estar en favor de la pena de muerte.
“Tengo un vecino que fue asesinado y fue bien duro para mi familia... Dependiendo de las circunstancias escogería la pena de muerte”, señaló la fémina antes de ser descalificada.
Otros precandidatos a jurado mencionaron que en casos de masacres, de asesinatos de personas inocentes, de hombres que asesinan a sus parejas e hijos, la pena de muerte debería ser considerada.
Otro acusado
Junto a Candelario Santana también enfrenta juicio el coacusado David Oquendo Rivas, quien se libró de la pena de muerte luego que el Departamento de Justicia en Washington decidiera no certificar su caso. Ambos están acusados de mantener una empresa criminal continua (RICO Act) dedicada al narcotráfico y actos violentos.
Dentro de esa empresa criminal, un gran jurado acusó a Candelario Santana de cometer al menos 19 asesinatos y ordenar otros dos, incluyendo las ocho personas que fallecieron en La Tómbola.
Candelario Santana y Rivera Oquendo están acusados también de conspirar para poseer narcóticos con intención de distribuir desde el 1993 hasta el 2009 y cargos por poseer armas de fuego..
Durante la Masacre de La Tómbola murieron Tina Marie Rodríguez Otero, Joan Manuel Class Guzmán, Pedro Semprit Santana, José Ángel Hernández, John Henry García Martínez, Samuel Ruiz Martínez, Rafael Ángel Ramos Rivera y Elisa del Carmen Ocasio.
Se espera que durante el juicio de pena de muerte, sobrevivientes de la masacre declaren en contra de Candelario Santana.
Asimismo, se espera que la Fiscalía federal presente evidencia de los 19 asesinatos que le imputan a Candelario Santana y de otros dos asesinatos que presuntamente ordenó que otros ejecutaran.
Por otra parte, ayer la juez presidenta del Tribunal Federal, Aida Delgado, pospuso el inicio del juicio de pena de muerte contra Lashaun Casey, acusado de asesinar al encubierto Jesús Lizardi Espada, para el próximo lunes debido a que está enfermo un experto de la defensa en selección de jurado.
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