HIGÜEY.- Los familiares de una señora que se
encuentra desaparecida desde el pasado día 8 ofrecieron una recompensa
de un millón de pesos a quien suministre información sobre su paradero.
Bellanilda Martínez Vázquez, tía de la desaparecida Wilma Teresa Martínez Barrientos, cree que la misma está con vida y que se halla secuestrada, pese a que no ha recibido llamadas reclamando dinero.
“Queremos que Wilma esté con nosotros, con sus niños, que no esté pasando trabajo donde la tienen”, exclamó angustiada la tía de la desaparecida desde hace 23 días.
El millón de pesos será entregado a quien ofrezca cualquier información que ayude a encontrar con vida a Wilma Teresa, las que pueden ser facilitadas de manera confidencial al celular 829-519-0238.
La señora Martínez Barrientos, de 27 años, reside en el sector Luisa Perla, de aquí, y fue vista por última vez la mañana del viernes 8 de este mes cuando abordó una yipeta blanca ocupada por tres hombres y dos mujeres, con tatuajes, y de apariencia extranjera.
Por el hecho, la Policía sometió a la justicia a la nombrada Crismeide Guerrero, residente en la calle Petronila Jiménez, del sector La Malena, con quien supuestamente la desaparecida dejó cuidando su hija de 6 meses de edad.
La joven está presa luego que el juez de la Instrucción Permanente, licenciado Edwin Rijo, le impusiera tres meses de reclusión como medida de coerción.
La Dirección de Investigaciones Criminales (DICRIM) han investigado a más de diez personas, incluyendo al esposo de Wilma Teresa, sólo identificado como Jim.
El comandante del Departamento de Personas Desaparecidas de la Policía ha viajado a esta ciudad con los encargados de Homicidios y el ministerio público, realizando allanamientos en busca de la desaparecida.
Pese a los esfuerzos, las autoridades no han podido localizar a la mujer.
UN APUNTE
Pide seguir búsqueda
El señor José Martínez Vázquez, padre de Wilma Teresa Martínez Barrientos, solicitó a las autoridades continuar la búsqueda de su hija.
Martínez Vásquez hizo un llmado al mayor general José Polanco Gómez, jefe de la Policía, a quien apeló en su condición de jefe del cuerpo del orden y de padre, para que la búsqueda de la mujer desaparecida no sea suspendida
Bellanilda Martínez Vázquez, tía de la desaparecida Wilma Teresa Martínez Barrientos, cree que la misma está con vida y que se halla secuestrada, pese a que no ha recibido llamadas reclamando dinero.
“Queremos que Wilma esté con nosotros, con sus niños, que no esté pasando trabajo donde la tienen”, exclamó angustiada la tía de la desaparecida desde hace 23 días.
El millón de pesos será entregado a quien ofrezca cualquier información que ayude a encontrar con vida a Wilma Teresa, las que pueden ser facilitadas de manera confidencial al celular 829-519-0238.
La señora Martínez Barrientos, de 27 años, reside en el sector Luisa Perla, de aquí, y fue vista por última vez la mañana del viernes 8 de este mes cuando abordó una yipeta blanca ocupada por tres hombres y dos mujeres, con tatuajes, y de apariencia extranjera.
Por el hecho, la Policía sometió a la justicia a la nombrada Crismeide Guerrero, residente en la calle Petronila Jiménez, del sector La Malena, con quien supuestamente la desaparecida dejó cuidando su hija de 6 meses de edad.
La joven está presa luego que el juez de la Instrucción Permanente, licenciado Edwin Rijo, le impusiera tres meses de reclusión como medida de coerción.
La Dirección de Investigaciones Criminales (DICRIM) han investigado a más de diez personas, incluyendo al esposo de Wilma Teresa, sólo identificado como Jim.
El comandante del Departamento de Personas Desaparecidas de la Policía ha viajado a esta ciudad con los encargados de Homicidios y el ministerio público, realizando allanamientos en busca de la desaparecida.
Pese a los esfuerzos, las autoridades no han podido localizar a la mujer.
UN APUNTE
Pide seguir búsqueda
El señor José Martínez Vázquez, padre de Wilma Teresa Martínez Barrientos, solicitó a las autoridades continuar la búsqueda de su hija.
Martínez Vásquez hizo un llmado al mayor general José Polanco Gómez, jefe de la Policía, a quien apeló en su condición de jefe del cuerpo del orden y de padre, para que la búsqueda de la mujer desaparecida no sea suspendida