1) Editorial
Decencia y PRD
23/07/2014 , El Caribe
La convención del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) no sólo dejó el amargo sabor a que nos tiene acostumbrados, no importa quiénes sean sus actores, habituales o practicantes de una decencia que siempre estará sometida a prueba. Y es que la fuerza de la tradición se convierte en regla de comportamiento. Pareciera que son las porfías los motivos que le dan vitalidad a su accionar. Y si las mismas resultan insuficientes, entonces irrumpe el caos, la violencia. No obedece a la dinamia de las grandes hazañas, que implican sacrificios, a veces mayores, pero con resultados que trascienden a la historia.
En este caso, es una apuesta como si se programara la autodestrucción. Tiene lamentables implicaciones de orden público, toda vez que se altera el ánimo y la paz ciudadana, con agravantes: heridas, incluso graves. Afortunadamente, esta vez no hubo pérdida humana.
Una actividad que se asumía para solventar el final de un diferendo, desata otro nivel de conflictividad. Esta vez hubo un nuevo ingrediente: Los perredeístas no se conformaron con sus trifulcas. La seguridad maltrató con brutalidad y vías de hecho a varios camarógrafos. Incluso uno fue despojado de un dispositivo de una cámara de televisión. Y varios periodistas se vieron expuestos a la violencia que se desató en una circunstancia que sólo sus protagonistas pueden contar con propiedad.
En fin, el derecho a buscar y transmitir informaciones fue lesionado, y la seguridad de los comunicadores fue puesta a riesgo, lo que compromete al PRD y a su liderazgo institucional. Repudiamos la actuación de los agentes mal llamados de seguridad y cuestionamos a la autoridad a que obedecían.
El momento es oportuno para señalar que entre los políticos hay una tendencia a censurar a los medios de comunicación, y particularmente a los periodistas, cuando su comportamiento queda expuesto, o simplemente en entredicho. Se asumen como incólumes. ¡Ay si se sienten criticados! Los hay en todos los bandos, en algunos, con cierta propensión a las amenazas veladas y otras veces a los insultos. Igual rechazamos ese temperamento.
El PRD debe adecentarse.
Los periodistas seguiremos cumpliendo nuestro deber. -
2) Editorial
Un grupo de reporteros gráficos realizó el pasado lunes un gesto de solidaridad con sus colegas que fueron agredidos durante la convención del Partido Revolucionario Dominicano (PRD).
Sin faltar a su misión de informar y recoger las versiones de los actores envueltos en el conflicto, estos reporteros gráficos bajaron sus cámaras durante unos momentos antes de que empezara una rueda de prensa convocada por la Comisión Nacional Organizadora (CNO).
Los voceros de la CNO reaccionaron pidiendo disculpas a nombre de la organización por las agresiones de que fueron objeto periodistas.
Corresponde a las autoridades del Estado investigar el caso y someter a la Justicia a las personas que tuvieron responsabilidad en las agresiones, las cuales pudieron culminar en muertes.
EL DÍA se solidariza con el gesto de los reporteros gráficos, pues acciones como las del domingo pasado de ataques directos a la prensa no pueden pasar desapercibidas, como si se tratara de un simple incidente más.
En ese gesto de los reporteros gráficos se recoge la indignación de los periodistas dedicados a informar, a ser testigos de los sucesos para contarlos al gran público.
Un buen gesto con el que nos solidarizamos.
3) Una "convención" sin sorpresas
A nadie debe sorprender lo ocurrido durante la recién pasada "convención" del Partido Revolucionario Dominicano. Las evidencias fueron acumulándose durante meses, diseñando con anticipación el espectáculo puesto finalmente en escena.
La democracia, ese cardinal concepto que el uso espurio ha prostituido, fue la convidada de piedra a la farsa del domingo. Durante todo el tiempo del montaje se la relegó incluso al más oscuro rincón del trastero de las apariencias. La "convención" consumó su escarnio.
En el alud de opiniones que provoca cada disturbio perredeísta, resaltan esta vez las que decretan la definitiva muerte del partido. Quizá resultaría más certero hablar de sepultura, porque muerto está desde el momento mismo en que la visión empresarial y el oportunismo político se adueñaron a capa y espada de sus estructuras y de su discurso.
Seamos realistas. Los "resultados" convencionales no complican la situación, la definen de una vez por todas. Solo los muy lerdos podrían no ver que constituyen el abono aportado por el "miguelismo" a la navegación de la corporación PLD por mares con vientos cada vez más a su favor.
Quizá sobre suspicacia, pero un reciente artículo de prensa de uno de los más conspicuos publicistas del presidente "reelecto" del PRD, convence de que los grumetes miguelistas se empeñarán a partir de ahora, logrado el objetivo de la hegemonía, en cumplir su faena en la buena navegación no del PLD, sino y particularmente, de Leonel Fernández.
Siendo así, no andará descaminado quien sustente -a luz de lo sucedido-- que la "reelección" de Vargas Maldonado es parte del compromiso sellado cuando, sin ser máximo dirigente de la organización y desconociendo todas las jerarquías institucionales, fue uncido interlocutor por Leonel Fernández, con quien firmó el malhadado "Pacto de las corbatas azules".
"La pregunta pertinente ahora es si los últimos golpes recibidos y lo que puede ser un panorama interno adverso, además de la virulencia con que lo enfrentan algunas entidades de la sociedad civil y el sector perredeísta de Hipólito Mejía, serán suficiente embestida para que el León no pueda rugir, como a él le gusta decir, en el futuro inmediato de la constelación política nacional", escribió el íntimo publicista de Vargas Maldonado, deslumbrado por el metro, los elevados, las autopistas... apuestas todas por una "modernidad" de la que Funglode es la guinda.
Si las encuestas no mienten, y no suelen hacerlo, el destino político de Vargas Maldonado es ser centrifugado de la memoria social. Él y sus seguidores lo saben. Por eso desde hace mucho la política no tiene para ellos propósito transformador alguno. Esto explica el desenfadadostriptease del pasado domingo.
4) El día en que la dignidad brotó del alma de los reporteros contra las agresiones a la prensa
MARTES, 22 DE JULIO DE 2014 17:02 CIUDAD ORIENTAL
Por Robert Vargas
El 21 de Julio del año 2014 quedará marcado en la historia del periodismo dominicano por ser el día en que el sentimiento de solidaridad, unidad y dignidad le brotó de lo más profundo del alma a los reporteros gráficos y los fotógrafos que arriesgan sus vidas en cada jornada sus vidas por captar las mejores imágenes para llevarla a los lectores.
Ese día, como nunca antes, los cámaras y foto reporteros le hicieron entender a la dirección del Partido Revolucionario Dominicano y a los demás líderes del país, que ellos no pueden andar atropellando a periodistas, camarógrafos y fotógrafos.
Le hicieron entender que no pueden, impunemente, andar arracando materiales gráficos a punta de pistolas amparados en que son "líderes".
Esa acción rebosante de dignidad, solidaridad y unidad, la protagonizaron los profesionales del lente frente a los jefes de los pistoleros que le pusieron cañones en la cabeza a uno de los suyos para obligarlos a entregarle una tarjeta en la que estaban contenidas imágenes de primera mano del desorden en el local nacional del PRD un día antes.
Esos "muchachos", que solo tienen para ellos la satisfacción del deber cumplido, porque les pagan extremadamente mal, fueron capaces de reaccionar contra los abusos y mentalidades criminales, en el mismo lugar donde varios de ellos fueron atropellados, golpeados y encañonados por pistoleros contratados por el partido de Miguel Vargas Maldonado.
Ya Julio Mariñez ni Juan carlos Guerrase les veían tranquilito. No eran entonces lo todopoderoso que se mostraban dos días antes mientras Victor Gómez casanova daba pena en ese escenario.
Allí estaban los flamantes miembros de la CNO, sentados, sin saber cómo reaccionar, no porque los cámaras y fotógrafos hicieran algo, sino, precisamente, porque ...¡Se cruzaron de brazos y no hicieron nada!.
Les demostraron que sin los fotógrafos, los periodistas, los camarógrados, nada de lo que digan (verdades o mentiras), llegarán al gran público. Les demostraron que en la unidad está la fuerza.
Lo hicieron corriendo el riesgo de que alguno pudiera ser cesado en su puesto de trabajo. Pero, el medio que lo haga, sabe perfectamente que cargará con la afenta de la complicidad con los agresores.
Vayan las felicitaciones de CiudadOriental.org para esos hombres y mujeres de la prensa que, con cruzarse de brazos, le dieron una mayúscula bofetada a los agresores del PRD que contratan pistoleros para que golpeen camarógrafos y les arranque teleéfonos celulares y tarjetas con imágenes que aún mantienen secuestradas.
Así se hace y que esto sirva de advertencia para otros que actúen de forma agresiva contra los trabajadores de la prensa.
La libertad de información y de acceso a las fuentes hay que defenderla.
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5) "Tira, tira, que ellos no son de nosotros" y "el que brincó se murió", se ordena a seguidores armados de Miguel Vargas
SANTO DOMINGO (R. Dominicana).- El video secuestrado a SIN por seguidores de Miguel Vargas Maldonado el pasado domingo durante los incidentes en la "convención", demuestra sin margen para la duda de dónde provinieron los disparos y cuál era la orden previa que tenía el grupo de hombres armados que bajo la dirección de Rafael (Fiquito) Vásquez, actuó contra los partidarios de Guido Gómez Mazara.
"Tira, tira, tira, que ellos no son de nosotros", ordena una voz a civiles armados dentro de la casa nacional del PRD. Para despejar la confusión provocada por los primeros disparos, alguien afirma que "to' el que ta' aquí adentro e' de nosotros".
"E pa'lla, e' pa'lla la vaina", se escucha a Vásquez orientar a un hombre que porta una pistola, dirigiéndolo hacia la parte frontal del local, donde se encontraban, en la calle, los seguidores de Gómez Mazara.
"El que brincó se murió. El que bricó ahí arriba, esa es la orden que hay", dice alguien a tres hombres, también vestidos de civil, que portan armas de fuego.
En la narración de los hechos que recoge el video, la periodista Alicia Ortega resalta que la orden de disparar contra los contrarios se imparte como si el valor de la vida dependiera de la facción en que se milita.
Antes del tiroteo, el camarógrafo de Noticias SIN, Víctor Vicente, grabó también cómo por orden de Julio Mariñez, presidente de la Comisión Nacional Organizadora de la convención, se impidió a Gómez Mazara entrar al local para ejercer su derecho al voto y de supervisión del proceso.
Asimismo, y desmintiendo la imputación de responsabilidad que le hicieraVargas Maldonado en su discurso de agradecimiento por su reelección, se ve a Gómez Mazara abandonar el lugar junto a su madre Carmen, el exgeneral Percival Peña y el resto de sus acompañantes, antes de que se produjera la balacera.
El video dado a la publicidad en la emisión estelar de Noticias SIN de este martes, fue entregado el lunes en la noche por una comisión encabezada por el diputado Víctor Gómez Casanova a los periodistas Alicia Ortega y Marino Zapete.
Desde que Noticias SIN hiciera pública la confiscación del material fílmico obtenido por Vicente, las organizaciones periodísticas y numerosos sectores de la opinión pública demandaron sistemáticamente que les fuera devuelto a la empresa.
Además de la agresión contra el camarógrafo, los seguidores de Vargas Maldonado agredieron a otros periodistas, a algunos de los cuales les borraron fotos captadas con celulares.
En protesta por las agresiones, camarógrafos y fotorreporteros que asistieron en la noche del lunes a la lectura del segundo y último boletín de la "convención" bajaron sus cámaras y se negaron a filmar y fotografiar a los dirigentes miguelistas.
6) Una tragedia que no es sólo del PRD
La llamada "convención" del PRD, Miguel Vargas y su grupo ha terminado en otra tragedia, pero esta vez, más que una reiteración de la inveterada tendencia a la pendencia de esa colectividad política, constituye una expresión de la peligrosa de degeneración del sistema político dominicano. Muchas de las acciones cometidas por el referido grupo para detener la voluntad y propósitos de Guido Gómez, tipifican como delincuenciales a las cuales debe dárseles una firme condena política y legal.
El recurso a acciones de ese tipo, para impedir la libre y normal participación del grupo de Guido Gómez, demostraron que la irresponsabilidad de la JCE, al abstenerse de enviar observadores a la "convención", como lo dictan los usos y costumbres de esa institución ante los procesos electorales intrapartidarios y los parcializados fallos del TSE a favor del grupo de Vargas, tenían como propósitos dejarle manos libres a este para que hiciese cuanto quisiera para que mantuviese el control de las siglas PRD.
Vargas y la alta dirección peledeísta, hubiesen querido una convención "normal" y seguir reduciendo el PRD a simple bisagra de los gobiernos del PLD, pero si las circunstancias lo requerían, no renunciaban al recurso de las más burdas y delincuenciales acciones para mantener el secuestro de la franquicia PRD y eso hicieron. Con esa estrategia el binomio Leonel/Danilo ganaba de todos modos, pues los hechos del domingo pasado constituyen otro golpe a la imagen del PRD y de todo cuanto se le parezca o pueda parecérsele.
Lo del domingo, fue una tragedia para la democracia dominicana; las imágenes de los actos de violación a principios elementales de la convivencia democrática, los atropellos a la libre información de la prensa no sólo empañan la imagen de lo que fue, significó y aún significa el PRD para un importante segmento de la población dominicana, a pesar del secuestro en que se encuentran sus siglas y símbolos, sino que empañan la imagen del país a nivel internacional.
Vargas ha salido debilitado en extremo y de su grupo sólo sacan la cara para defender su "convención" el "vocero" de la misma, un tránsfuga balaguerista y uno que otro personaje de dudosa seriedad. Un sector de la prensa que una vez le fue indulgente hasta el apoyo, hoy tiene que admitir la ilegitimidad y real catadura de aquel y a sus padrinos les será más difícil justificar el dinero que la JCE le suministra cada mes a ese grupo para mantener a sus secuaces.
Esa circunstancia en gran medida ha sido fruto de determinación de Guido Gómez y su grupo de enfrentar a Vargas en su propia madriguera y obligarlo a exponer su debilidad y lado más oscuro. Esto permite preguntarse si ese episodio del domingo, que no es un desenlace definitivo de la crisis del PRD, en fin de cuentas no constituye también una derrota política para quienes optaron por la simple salida de ese partido al no encontrar una salida al problema Miguel Vargas.
Podría pensarse que un importante sector de dirigentes de base y medios del PRD hubiesen querido una batalla más decidida e inteligente contra el grupo de Vargas que lo acorralase y con él al binomio Leonel/Danilo, demostrando en condiciones diferentes lo que se demostró el domingo: la extrema pequeñez y real catadura ética y política de la banda que dirige Vargas. Que era difícil, que era una pérdida de tiempo, es posible, pero en la política las batallas que no se dan, generalmente son batallas que se pierden.
El tiempo la responderá y situará en su justa dimensión lo ocurrido ese trágico día, no sólo para el PRD, sino para la sociedad dominicana. También dirá la última palabra sobre el impacto que tendrá ese día en el futuro inmediato de este país y sobre las nuevas y viejas agregaciones políticas del sistema.
